lunes, 27 de febrero de 2012

Comparativa caso Viajes Marsans - Similitudes y "coincidencias". Dos partituras parecidas (5)

Según publica hoy El Economista, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual movieron todos los hilos necesarios para alejar de las manos de los acreedores sus bienes más preciados: coches de lujo, fincas, inmuebles... El ex presidente de la CEOE traspasó a Aszendia, un despacho de abogados propiedad de Ángel de Cabo, un Rolls Royce valorado en medio millón de euros para salvarlo del embargo que había decretado el juez sobre sus bienes para hacer frente a los avales personales que otorgó en los últimos meses de vida de Marsans.

La operación está siendo investigada por la Audiencia Nacional por un posible delito de estafa procesal, es decir, por entregar documentación falsa al juez con el objetivo de obtener una resolución judicial injusta.

Según se recoge en una denuncia, la venta del bien se realizó dos días después de que el juez ordenara el embargo, pero la factura que presentó para justificar que el vehículo de lujo ya no era suyo estaba fechada varios días antes. Tras la operación, el Rolls Royce se trasladó a la sede en Valencia de la sociedad de Ángel de Cabo, donde ha permanecido hasta la fecha.

Proteger sus posesiones

Pero esta no es la única operación que el fundador de Posibilitum, la empresa que compró Marsans y Nueva Rumasa, ha llevado a cabo para sacar los activos de los concursos de acreedores y evitar que se usen para hacer frente a las deudas.